El colorido pueblo pesquero de Bermeo contiene en sus más de 40 km de costa algunas de las joyas de Bizkaia como San Juan de Gaztelugatxe o el Cabo Matxitxako.
Hay algo en el aire de Bermeo que cautiva hasta al más exigente de los visitantes. No está claro si el culpable es su pintoresco puerto viejo, sus cautivadoras playas, el imponente San Juan de Gastelugatxe o la oferta gastronómica de la zona, pero lo que sí te aseguramos es que, si decides visitar Bermeo soñaras con el día de volver a poner un pie en esta villa pesquera.
Protegido por el cabo Matxitxako, y situado dentro la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, uno de los espacios naturales más impresionantes de nuestra costa vasca, Bermeo es con Ondarroa el principal puerto pesquero del antiguo Señorío y su historia estuvo íntimamente unida a la de su puerto. Hoy en día, Cabeza de Vizcaya, así se llamó Bermeo en la Edad Media, continúa viviendo del mar y de la pesca, como así lo demuestran la gran cantidad de empresas conserveras que posee y los coloridos barcos pesqueros de su puerto.
De singular personalidad y encanto, el pintoresco pueblo de Bermeo guarda en su línea de costa increíbles acantilados y formaciones rocosas como San Juan de Gaztelugatxe y las islas de Akatz e Izaro, así como una pequeña joya, la playa de Aritzatxu.
Sin duda, Bermeo ofrece infinidad de lugares que nos cautivan fácilmente. Algunos ya los hemos nombrado, pero no son los únicos, así que si quieres saber todo lo que hacer y ver en Bermeo, ¡Acompáñanos!.
Casco histórico de Bermeo
En los rincones del casco antiguo de Bermeo, declarado Bien Cultural en la categoría de Conjunto Monumental, se respira ambiente marinero en las calles y plazas, y el puerto viejo le da carácter al municipio. Las calles empedradas y empinadas que se entrecruzan, las plazas con sabor marinero y las casas coloridas prolongan la esencia pesquera de su puerto, como si los barcos pesqueros se hubieran acercado, quedando varados eternamente sobre su suelo empedrado.
Aunque la villa fue amurallada y contaba con 7 puertas de entrada, el único vestigio arquitectónico defensivo que queda en pie en la actualidad es el arco de San Juan (del siglo XIV), salida que llevaba a los Bermeanos y Bermeanas a San Juan de Gaztelugatxe. Sobre un arco rebajado, preside la cara interior una hornacina con la imagen del santo en su interior.
Más abajo se sitúa el Ayuntamiento, del siglo XIX, con dos relojes de sol en su fachada.Y justo encima del puerto, se encuentra la única torre que queda en pie en el casco antiguo. Hoy en día es sede del Museo del Pescador del que hablaremos más adelante.
Además de estos rincones, la iglesia neoclásica de Santa María de aspecto greco-romano y La iglesia gótica de Santa Eufemia también merece una visita. Los Señores de Bizkaia juraban los Fueros en esta última iglesia. Especial mención se merece también el Convento de San Francisco y su claustro, el único medieval que queda entre los monasterios de Vizcaya.
Puerto de Bermeo
Uno de los rincones más pintorescos de Bermeo es probablemente su marina, también conocido como Puerto Viejo o Portu Zaharra.
El bonito puerto de Bermeo lleno de coloridas casas es uno de los mejores lugares de la villa marinera para disfrutar de su gastronomía en las terrazas de algunos de sus bares y restaurantes. Así que si os acercáis un domingo no os olvidéis de tomar algunos pintxos o rabas con un buen txakoli en algunos de sus bares y restaurantes.
Junto al Puerto, en el antiguo espigón os espera una escultura muy especial, la ola de Néstor Basterretxea, con la que el escultor quiso homenajear a su pueblo natal.
Parque de la Lamera
El parque de la Lamera es otro de los lugares favoritos de los vecinos de Bermeo para quedar a tomar algo. Hoy convertido en zona de recreo, no siempre fue así. Hasta 1905 era un paraje de piedra y arena en la desembocadura del río Artika, utilizado para el fondeo de embarcaciones.
Pero si hemos querido dedicar unas líneas a este parque, es porque debido a la zona donde esta ubicado se pueden divisar muchos lugares con encanto: el museo-barco ballenero Aita Guria, hoy en día en reparación, el astillero, el muelle sur, e iniciar el camino hacia el puerto.
Pero dentro del parque, hay algo que merece especial atención, el Casino de Bermeo. Si creéis que encontraréis una salón para lanzaros al juego os llevaréis una decepción, porque este edificio de carácter señorial y con toque parisino en realidad alberga una sala de exposiciones y conferencias, ‘Nestor Basterretxea’, un restaurante y dos bares cafeterías.
La Tala
Como cada uno de los pueblos situados en la costa vasca, Bermeo también tiene una atalaya desde donde admirar el mar. Aunque antiguamente se utilizaba para el avistamiento de ballenas, hoy en día los Bermeanos se acercan a la Tala para tomar algo en su pequeña cantina o para disfrutar entre amigos o familia mientras observan el horizonte.
Talape y Tonpon, playas salvajes de Bermeo.
Como su propio nombre indica, Talape no se encuentra muy alejada de la Tala, concretamente esta situada debajo de ella. Esta pequeña cala rocosa, no es la más apropiada para vosotros si lo que os gusta es pasear por la arena o estar tumbados en la toalla. Aunque, es un lugar tranquilo, desde donde admirar la isla de Izaro y darse un baño, en algunas ocasiones sin nadie alrededor.
Muy cerca de la Tala se encuentra el Tonpon. Desde lo alto nos ofrece unas vistas privilegiadas de Izaro y Ogoño. Pero si lo que queréis es un sitio tranquilo para daros un chapuzón, acceder por las escaleras y buscar un hueco para dejar la toalla. Es una playa rocosa, por lo que cómoda no es, pero os permitirá disfrutar de la tranquilidad en muchos momentos.
Playa Aritzatxu
Si estabas pensando encontrar en Bermeo una kilométrica playa donde darte largos paseos, te vas a decepcionar. Pero a cambio, este precioso pueblo marinero nos ofrece otros rincones más salvajes y de aguas cristalinas en sus 40 km de costa que te sorprenderán.
Uno de ellos, es la playa de Aritzatxu, una pequeña y atractiva cala de arena dorada que es la favorita de los Bermeanos en los días de sol. Su mayor atractivo visible es una roca desde la que los lugareños se lanzan al agua. El invisible, es su diversidad marina, por eso este pequeño rincón es perfecto para practicar submarinismo.
Pero, si lo que quieres es tirarte en la toalla y refrescarte de vez en cuando con un buen chapuzón, recuerda colocar la toalla en la arena cuando la marea este bajando, sino puede que la veas flotando en el agua mientras estás disfrutando del baño. No te olvides de que las dimensiones de la playa son muy pequeñas, así que la mayor parte de la arena queda cubierta en marea alta. Aunque, existe otra alternativa. Una zona de hormigón habilitada para que podamos disfrutar de esta pequeña cala en cualquier momento.
A la playa de Aritzatxu no se puede acceder en coche. Pero, podéis conducir hacia el cementerio y aparcar en las inmediaciones y desde allí tomar el camino que nos dirige a Aritzatxu, entre las privilegiadas casas de la zona.
- SERVICIOS: Socorrista (en época estival), duchas y bar-chiringuito (en época estival)
- ACTIVIDADES: Submarinismo.
San Juan de Gaztelugatxe
Si hay un lugar que no puede faltar en esta lista, ese es San Juan de Gaztelugatxe, una pequeña isla rocosa unida a tierra por una gran escalinata que se ha convertido en los últimos años en el segundo lugar más visitado de Bizkaia, después del Museo Guggenheim de Bilbao.
Para llegar hasta la ermita que corona la imponente roca sobre el mar hay que superar los 241 escalones que lo separan de tierra. Una escalinata que seguro disfrutaréis a cada paso, y que os servirá para que no perdáis detalle de cada punto que hace que este lugar sea inmejorable, En el camino pararos de vez en cuando a observar la pintoresca ermita en su cumbre, el bravo mar cantábrico, los acantilados, los arcos del puente de piedra sobre el mar…San Juan de Gaztelugatxe es uno de esos lugares que una vez lo habéis visto se os quedará en la memoria grabado para siempre.
Nosotros os recomendamos visitarla de otoño a primavera, cuando la isla está más tranquila. Así, podréis saborear mejor su misticismo y belleza. Aunque, otra muy buena opción es acercarse a Bermeo un 24 de Junio, para realizar junto a los Bermeanos la tradicional peregrinación a San Juan de Gaztelugatxe. Si queréis conocer más de este increíble lugar así como poder acceder a él podéis visitar nuestro artículo sobre San Juan de Gaztelugatxe.
Cabo Matxitxako
Situado entre Bermeo y San Juan de Gaztelugatxe se encuentra el Cabo Matxitxako, cuyo faro es el más importante de Bizkaia. Hoy en día, existen dos faros, el antiguo, del cual actualmente solamente queda la torre y el nuevo faro, situado a escasos metros de la antigua torre.
Hace unos años al antiguo faro se le añadió un pequeño mirador, ya que es uno de los lugares favoritos para los amantes de avistamientos de aves, sobretodo en octubre. Y si tenéis suerte el día que os acerquéis, a lo mejor lográis ver algún cetáceo, eso sí no os olvidéis los prismáticos.
Pero, aunque no encontréis ningún animal acuático ese día, seguro que disfrutaréis de las vistas al mar cantábrico, la tranquilidad, y además de la historia, ya que en este lugar se produjo la mítica batalla de Matxitxako.
Isla de Ízaro
Esta isla que protege la entrada a Urdaiabai está llena de historia. Y es que, aunque en la actualidad la isla se encuentra deshabitada, ha servido de cobijo a edificios religiosos como el convento de los franciscanos o la ermita de la Magdalena, edificaciones de las que nada queda hoy en día.
Pero si por algo es famosa Izaro, es por la bonita rivalidad entre los pueblos de Bermeo y Mundaka. Aunque la isla de Ízaro está más cerca de Mundaka, pertenece en realidad a Bermeo. Cuenta la leyenda que bermeanos y mundakenses decidieron disputar una regata al amanecer para disputarse la isla, bajo arbitraje de Elantxobe, quién también reclamaba la isla pero al final, parece que cedió a sus pretensiones. Decidieron que comenzarían al cantar el gallo, y así lo hicieron saliendo victoriosos los Bermeanos, aunque perdiendo a uno de sus hombres durante la regata. Sin embargo, los mundakenses aseguran que los bermeanos encendieron las hogueras para que el gallo cantara antes, y de esa forma conseguir la ventaja necesaria para ganar la regata. Otros aseguran que emborracharon a los mundakenses.
Lo que si podemos asegurar es que actualmente se realiza una regata cada 22 de julio para recordar los límites de Bermeo. Una fiesta de hermanamiento en la que participa, Mundaka, Bermeo y Elantxobe.
Museo del pescador
Sobre el Puerto Viejo de Bermeo, camino a la Tala, se alza la histórica Torre de Ercilla, del siglo XV y declarada Monumento Nacional en 1943. Desde que el Museo del Pescador abriese sus puertas en 1948, sus salas se ha dedicado exclusivamente a mostrar el ámbito, vida y trabajo de los pescadores vascos.
Caminado por sus cinco plantas encontrarás información acerca de la costa vasca, sobre todo de los pueblos pesqueros, de la vida, de las costumbres, de las familias, de sus embarcaciones, de las diferentes técnicas para construir los barcos, y las técnicas que han empleado a través del tiempo para la pesca y la comercialización del pescado.
Un bonito viaje sobre el mundo que rodea la pesca, tan ligada al País Vasco. No os defraudará.
Monte Sollube
Pero no todo es mar en Bermeo. La montaña también cobra protagonismo en Bermeo al extenderse dentro de sus límites uno de los montes bocineros de Bizkaia junto con el Gorbea, Kolitza, Oiz y Ganekogorta. Desde su cima se convocaban las Juntas Generales de Vizcaya, mediante señales sonoras, con bocinas hechas de cuernos y, luminosas con grandes hogueras.
Desde su punto más alto, en Arrieta, se pueden observar unas vistas excepcionales de gran parte de Bizkaia, pero sobre todo de Mungialdea y Busturialdea. También son visibles los montes Oiz, Anboto, Gorbeia, Udalatx y Ganekogorta.
Arrain Azoka
Como no podía ser de otra manera, Bermeo, el que fuera uno de los puertos más importantes de la costa vasca, acoge la Arrain Azoka, la feria de pescado y conservas más importante del cantábrico. Durante el penúltimo fin de semana de mayo, Bermeo abre sus puertas a todas las personas que deseen disfrutar de su gastronomía, conocer su cultura y disfrutar con su gente.
Si os animáis a ir a este fiesta Bermeana, encontraréis e sus puestos los productos que elaboran las conservas de Bermeo, presentando cada año novedades y podréis degustar productos difíciles de encontrar en el mercado.
CÓMO LLEGAR A BERMEO
Bermeo es junto con Gernika una de las poblaciones más importantes de Urdaibai, y también de la comarca de Busturialdea, por lo que llegar hasta aquí es fácil. Bien en transporte público o privado.
Para llegar a Bermeo con nuestro vehículo podemos tomar la carretera que une Bilbao – Mungia – Bermeo, BI- 631, pasando por el monte Sollube. Una ruta que nos permite hacer una alto en el camino para disfrutar de las espectaculares vistas que nos ofrece el jardín trasero del restaurante Canon situado en el Alto de Sollube. Haz una paradita, ¡No te arrepentirás!.
Aunque, también podéis optar por admirar las panorámicas que nos ofrece la carretera que recorre la costa, y que une los municipios de Bakio y Bermeo, BI – 2101.
Ambas opciones nos llevarán a nuestra meta, Bermeo, a través de espectaculares paisajes. ¡Os lo dejamos a vuestra elección!.
Dónde comer en Bermeo
En lo alto de Sollube, en la carretera que une Mungia y Bermeo se encuentra un bar restaurante que por la terraza y sus vistas bien merece que hagáis una parada. Tomar algo en su terraza, disfrutar de su menu del día, o degustar alguno de sus platos de la carta mientras nos relajamos admirando las vistas hacia el mar cantábrico, Bermeo o la Isla de Izaro, entre otros. Es una opción que al menos hay que considerar.
Dónde dormir en Bermeo
Bermeo no cuenta con demasiados alojamientos, pero los que decidáis visitar la villa marinera y disfrutar de ella un poquito más, podréis encontrar un hotel, una casa, un apartamento o un hostal a buen precio en el centro de Bermeo o en su periferia.
En el barrio Arronategi de Bermeo, en plena naturaleza, se encuentra el Hotel – Rural – Apartamento Atxurra. Este hotel te ofrece tranquilidad y naturaleza y muy buena ubicación si quieres disfrutar del mar y la montaña, ya que se ecuentra cerca de la cima del monte Sollube.
RECOMENDACIONES:
- APARCAMIENTO EN BERMEO:
- A la entrada del municipio encontraréis aparcamientos gratuitos.